Petróleo&Minería

Fracasa el modelo hidrocarburífero del Gobierno y el sector está en su etapa más critica

Fracaso. Las noticias del sector otrora más importante del país, el hidrocarburífero, se encuentra en la etapa más crítica de los últimos 20 años pues ya no representa un jugador importante en Latinoamérica y peor desempeñarse como centro energético. Las críticas y culpa van directas al Gobierno, especialmente al Ministerio de Hidrocarburos y la estatal YPFB.

Las actividades desarrolladas más importantes en los últimos 4 a 5 años implican la perforación de 25 pozos exploratorios de los cuales 12 pozos resultaron un fracaso exploratorio y 13 están definidos como éxitos exploratorios.

La búsqueda de nuevos yacimientos de gas natural en Bolivia se ha visto empañada por una serie de fracasos en el intento de descubrir nuevas reservas para encarar el desarrollo de mercados o el cumplimiento de los mercados actuales que se encuentran a pronto de ser terminados precisamente por la falta de garantías del energético.

Se estima que esta cadena de desaciertos ha ocasionado pérdidas financieras que ascienden a la cifra de mil millones de dólares para el período analizado, generando un impacto devastador tanto para la industria energética boliviana como para la empresa estatal YPFB.

Diferentes analistas han sido enfáticos y claros al valorar las consecuencias económicas de estos fallos, calculando la pérdida en mil millones de dólares, afectando una docena de proyectos gasíferos.

Una de las observaciones más relevantes de los especialistas es que se vuelve a la perforación de lo pozos denominados políticos porque están siendo perforados en zonas donde no existe ninguna clase de infraestructura de desarrollo para el caso de un descubrimiento comercial que llevaría otros 8 años ponerlos en producción plena como son el caso de los pozos de Lliquimuni y en su momento los de Tacuaral en la misma zona.

Otra de las observaciones son los denominados pozos de investigación estratigráfica que no es recomendable hacerlos en época de vacas flacas sino en etapas donde existe bastante flexibilidad económica y muchas veces exceso de producción.

A pesar de estos contratiempos, el analista Fernando Rodríguez destacó en una entrevista de opinión a un medio periodístico, la existencia de pequeños descubrimientos de pozos, aunque su alcance es insuficiente para compensar las reservas perdidas. «Hablamos de algo que no sirve para reponer las reservas en la magnitud de lo que exportamos o consumimos en el mercado interno»,
explica el analista.

Por otro lado, Raúl Velásquez, analista de la Fundación Jubileo, lamenta la falta de iniciativa en la búsqueda de nuevas reservas. «Yo creo que hay gas, pero si no buscamos, no lo encontramos», declara Velásquez, resaltando la importancia de la exploración y la necesidad de incentivos para impulsar esta actividad.

Situación actual
Actualmente, Bolivia produce 33,7 millones de metros cúbicos de gas por día, exportando a Brasil 14 millones de metros cúbicos diarios, a Argentina 5 millones de metros cúbicos diarios, y destinando 14 millones de metros cúbicos diarios al mercado interno.

YPFB en una reciente publicación establece que existe un incremento en la producción de petróleo crudo de 132% en 2023. ( anunció que el incremento en la producción de petróleo crudo se elevó en 1,4 millones de barriles, es decir un 132 %, gracias a los trabajos desarrollados en el campo Boquerón y Yarará, que aumentaron su producción en 1.800 y 420 barriles de petróleo día, respectivamente (Fuente: Red Uno).

Sin embargo cuando se busca tal incremento, no se lo puede visualizar pues las estadísticas de producción publicadas por entes especializados no reflejan tales incrementos. La realidad está muy lejos de las perspectivas y declaraciones del presidente de YPFB que si cree lo que el mismo dice, no habrá mayor esfuerzo para mejorar las cosas en el país.

El grafico siguiente muestra la realidad sucesiva de los acontecimientos de los últimos años haciendo hincapié sucesivo de los tiempos expresados en la presente nota relacionada solo con la producción de petróleo condensado en Bolivia.

La grafica arriba mostrada muestra la condición de la producción de líquido en plena declinación a un ritmo aproximado de 5000 Mbbls/año sin mostrar ninguna recuperación como lo publica YPFB de incrementos de 4.6MMbbls.

Vamos un poco más adentro

Para evitar el enmascaramiento de la escala de valores o tiempos de análisis, que suele ocurrir en evaluaciones como la presente, se reduce el periodo de análisis y no se ve ninguna diferencia ni cambios en el nivel de declinación de la producción del petróleo condensado.

Finalmente se muestra el periodo correspondiente al pasado año 2023 el cual sigue mostrando la misma declinación lo cual concluye que los 2.000 MM $us estimados por diferentes analistas y las mismas publicaciones de YPFB, de los cuales 1.000 MM $us fueron pozos negativos, solo sirvieron para aliviar en muy poco y en menor grado la producción de los campos productores.

Esto muestra claramente que los prospectos futuros no deben ser de “investigación estratigráfica”, ni pozos en áreas con bajos potenciales de producción ni en áreas donde poner una infraestructura puede llevar un quinquenio sino buscar en las zonas más prolíficas donde un pozo pueda producir fácilmente por encima de los 2 MM Mcd, es decir en el Subandino pero con las mejores técnicas de ingeniería y los mejores ingenieros y geólogos y no como se publicó en un medio por extranjeros
que apenas conocen el país.

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