El diputado opositor por Comunidad Ciudadana, Enrique Urquidi, retrucó las acusaciones del gobierno por bloquear los créditos en la Asamblea, afirmando que “es una mentira y una demagogia del presidente Luis Arce” de hacer creer a los bolivianos que los dólares llegarán al país en 48 horas si el Legislativo la cantidad de préstamos internacionales.
«Es lamentable que el presidente Arce haya perdido el sentido de la realidad y no asuma ninguna responsabilidad, demostrando una falta de autocrítica», señaló Urquidi. El diputado recordó que el gobierno, ante la escasez de dólares, ha culpado sucesivamente a los empresarios, a la derecha y ahora a la Asamblea Legislativa.
Urquidi subrayó que durante el tiempo en que Arce fue ministro de Economía, «tenía los bolsillos llenos» y ahora está «raspando la olla» debido al despilfarro de recursos públicos durante 18 años. «Hoy, el señor Arce enfrenta las vacas flacas y carece de argumentos para justificar la ineficiencia en la gestión de la crisis económica», añadió.
«No me sorprenden las declaraciones de diferentes autoridades del gobierno culpando a la oposición de un supuesto bloqueo legislativo a los créditos. Es una falacia pensar que, como por arte de magia, vendrán los dólares a cubrir la demanda de divisas de varios sectores productivos y comerciales del país», declaró Urquidi.
El diputado también cuestionó la ejecución de los fondos, señalando que el gobierno ya ha recibido aproximadamente 4 mil millones de dólares en créditos. «Hay obras camineras con créditos aprobados desde 2022 y no han puesto una piedra. Hace dos semanas inauguraron una doble vía a Oruro-Challapata, una obra ofrecida al departamento de Oruro hace dos años», puntualizó.
Además, Urquidi criticó la falta de transparencia del gobierno, mencionando que los ministros de Economía e Hidrocarburos se han negado a comparecer ante la Asamblea para rendir cuentas sobre las reservas de gas y otros asuntos económicos. «Todos se niegan a venir y rendir cuentas a la Asamblea y al país. ¿Por qué? Porque no tienen argumentos», afirmó.
Este cruce de declaraciones evidencia la fuerte tensión entre el gobierno y la oposición, en un contexto donde las decisiones económicas y la transparencia en la gestión pública son puntos críticos de debate en Bolivia.