Marcelo Olguín, gerente general de la Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia (Caneb), rechazó las insinuaciones del gobierno de que algunas empresas exportadoras no están entregando sus divisas, señalando que estas generalizaciones afectan injustamente la reputación del sector.
En una entrevista con el programa La Mañana en Directo de la red Erbol, abordó varios aspectos de la cadena de exportaciones y la relación de estas con las recientes medidas gubernamentales destinadas a asegurar el ingreso de divisas al mercado nacional.
Afirmó que la mayoría de las empresas exportadoras, alrededor del 95% al 99%, traen sus divisas al país, dado que necesitan financiar inversiones, empleos e insumos locales. Subrayó que este tipo de señalamientos generalizados pueden distorsionar la percepción pública sobre el sector exportador.
El representante de Caneb explicó que el gobierno tiene acceso a toda la información de las operaciones transaccionales de comercio exterior, incluyendo las declaraciones de exportación y la entrada de divisas al país.
Según Olguín, en los últimos dos meses se exportaron alrededor de 680 a 700 millones de dólares mensuales, cifras que representan una caída significativa respecto al año anterior, especialmente en el sector del oro, que ha visto una reducción de cerca de 200 millones de dólares por mes.
Olguín también se refirió al Decreto Supremo 5145, que exige a las empresas exportadoras traer el 100% de sus divisas al país, permitiéndoles retirar hasta un 10% para cubrir costos de logística e insumos necesarios. Aunque Caneb había solicitado una mayor flexibilidad, diferenciando entre sectores como el agroindustrial y el minero, la normativa vigente establece un margen uniforme del 10%.
En cuanto a la devolución de los Certificados de Devolución Impositiva (CEDEIMs), Olguín mencionó que ha habido demoras de hasta tres años, pero el nuevo decreto promete una devolución en un plazo de 15 días, lo cual es un avance significativo que mejorará el acceso a liquidez para las empresas exportadoras. No obstante, todavía existe una deuda acumulada con el sector de entre 400 a 500 millones de dólares.
Olguín también comentó sobre las comisiones por remesas del exterior, que han aumentado debido a la menor disponibilidad de divisas en la economía boliviana y en otros países, producto del incremento en las tasas de interés. Las empresas exportadoras han estado enfrentando comisiones más altas para transferencias y remesas, lo que incrementa sus costos operativos.
Señaló que las restricciones a la exportación de productos continúan debido a la preocupación del gobierno por controlar la inflación, lo que complica el panorama para nuevas empresas que desean ingresar al mercado exportador. Instó a considerar flexibilidades que mejoren las condiciones de atracción de divisas y, por ende, impulsen la economía nacional.