El Grupo de Puebla salió este jueves en defensa del expresidente Evo Morales por la reciente denuncia en su contra en un caso de trata de personas y estupro y lo consideró como una campaña de “lawfare” para dañar su reputación.
“El GRUPO DE PUEBLA expresa su profunda preocupación por la campaña de lawfare que se está empezando a desarrollar contra el compañero Evo Morales en Bolivia”, advierte un comunicado.
El bloque, compuesto por líderes progresistas, recordó que pese a “todos los esfuerzos de mediación” realizados entre el presidente Luis Arce y el exmandatario sus “legítimas diferencias parecen trasladarse ahora a los estrados judiciales con el evidente propósito de judicializar la campaña alrededor de casos y acusaciones en contra del expresidente Morales”.
El Grupo de Puebla consideró que algunas denuncias contra el exmandatario boliviano son “infundadas”, mientras que otras “ya fueran resueltas judicialmente en el pasado”.
“Hacemos un llamado a estar atentos a esta politización de la justicia ahora que algunas encuestas electorales favorecen ampliamente a Evo Morales”, sostiene el documento.
Frente a esa situación, el bloque invitó al Gobierno de Arce a “no permitir” que las propias autoridades judiciales o algunos organismos de control “participen en esta operación de daño reputacional contra un ciudadano”.
Recordó que ese tipo de prácticas van a contramano de la “ética del progresismo democrático y allanaría el camino a las aspiraciones de la derecha boliviana en las próximas elecciones presidenciales”.