El Gobierno racionaliza el uso del gas natural y la Cainco alerta
A través del Decreto Supremo 4794, el Gobierno restringe el uso del gas natural para los industriales con el fin de que YPFB pueda venderlo a mejores mercados. La Cámara de Industria y Comercio (Cainco) lanzó la alerta, porque la norma cambió la Categoría Industrial que les permitía transformar el gas natural en energía eléctrica y anticipa que subirán costos.
La norma fue promulgada por el presidente Luis Arce el 8 de septiembre y modifica el reglamento de distribución de gas natural por redes en la parte Categoría Industrial. El DS, en su artículo 1, dice que se busca “hacer un uso eficiente de combustibles fósiles en la producción de energía eléctrica”, y que por ello modificó el Reglamento de Distribución de Gas Natural por Redes que formaba parte del Anexo del Decreto Supremo 1996, de 14 de mayo de 2014.
El reglamento de ese DS 1996 decía respecto a Categoría Industrial: “Uso del gas natural como combustible en establecimientos industriales que tienen como finalidad transformar las materias primas en productos elaborados, pudiendo utilizar complementariamente el gas natural en la generación de energía eléctrica para consumo propio”. Esta última parte ya no figura en el nuevo DS 4794, que eliminó el textual “pudiendo utilizar complementariamente el gas natural en la generación de energía eléctrica”. Página Siete evidenció la modificación.
Ante ello, hay preocupación en los industriales. “Como Cainco no estamos de acuerdo con el Decreto Supremo (4794) porque le están quitando el gas a las industrias bolivianas para comercializarlo en el mercado externo, porque pagan más”, advierte Luis Fernando Strauss, gerente de Desarrollo Empresarial de dicha Cámara.
En la actualidad y con la finalidad de abaratar sus costos de energía eléctrica muchas empresas “han invertido en plantas de autogeneración de energía eléctrica en base al gas natural”, revela Strauss. Añade que a partir de la norma, el Gobierno ya no dará el gas natural para que las empresas lo transformen en energía eléctrica. “Ahora debemos interconectarnos al sistema nacional de Ende (Empresa Nacional de Energía Eléctrica)”.
Aquello significará, según Strauss, mayores costos de producción. “El precio de energía eléctrica será 60% más caro de lo que tienen en este momento y los costos van a subir hasta el consumidor final”, puntualiza.
El DS 4794 habla de un año para que las empresas se unan al Sistema Interconectado Nacional de Bolivia, que maneja la Empresa Nacional de Energía Eléctrica. “Les van a quitar a las empresas las posibilidades de conectarse al gas, cuando por ley está establecido que debe darse prioridad a la industria. Nos van a quitar para darse a los extranjeros”. La disposición final tercera habla de que volúmenes de gas natural que dejen de consumir industriales “serán destinados por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos para el mercado que genere mejores ingresos al Estado”.
Opina un experto
El presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, considera que con la aplicación del DS 4794, el Gobierno busca obtener ingresos por doble partida.
“En esa lógica deja de dar gas natural al sector industrial y lo vende a Argentina y Brasil que es más rentable, pero a la vez venderá energía eléctrica a esos industriales que en este momento generan la suya utilizando el gas natural del Gobierno”, explica el experto.
Según Romero, el Gobierno busca racionar el consumo de gas a los industriales que ahora sólo podrán utilizarlo para procesos productivos. “Sabemos que la energía eléctrica es cara y eso generará también ingresos para el Gobierno”, refrenda./Página Siete