Opinión

A 50 años del descubrimiento del manganeso de Mutún

Un día como hoy hace medio siglo atrás, el lunes 17 de mayo de 1971 fue descubierto el único yacimiento de manganeso que tiene Bolivia, el de San Pedrito situado en el cerro Mutún.

Durante la década del 60 del siglo pasado una Misión geológica alemana informó verbalmente que había descubierto una significativa «ocurrencia mineral» de criptomelano (Mn8 O16 (Ba, Mn) OH4), aunque lamentablemente no dejó ninguna constancia documental de que dicho hallazgo se haya producido realmente y abandonó el país, por cuya razón y con muchas dudas de por medio, Comibol ejecutó esporádicamente algunas expediciones exploratorias que no llegaron a ningún resultado positivo por lo que tomó cuerpo la idea de que en Mutún no existía ningún mineral de manganeso.

Sin embargo en la década del 70, el Gral. Carlos Hurtado Gómez presidente de la Comibol junto a su Gerente de proyectos el Ing Raúl Salazar le instruyeron al Ing Miguel González su gerente de Geología con base en Oruro y al superintendente de la mina Mutún el Ing Guido Mendieta, para que de inmediato tomen las providencias necesarias para que en un plazo máximo de tres meses (de marzo a mayo de 1971), se determine con absoluta seguridad la existencia real de manganeso en Mutún o se abandone definitivamente ese proyecto.

Gonzales y Mendieta ordenaron al Ing Jorge Blanco, jefe geólogo de la mina y más después a su reemplazante el Ing Hildebrando Martínez para que se inmediato se aboquen a la tarea encomendada que con todo su peso derivaron al geólogo de la mina el Ing Germán Carrasco Ardaya que de inmediato organizó una brigada de exploración geológica en base a personal de la sección de construcción.

Esta brigada improvisada y creada con escasos recursos técnicos y económicos, comenzó sus trabajos siguiendo las instrucciones de Oruro como si la zona fuese altiplánica por lo cual en marzo y abril tuvieron un resultado totalmente negativo complementada por las terribles penurias sufridas debido a las pésimas condiciones climáticas y a la topografía difícil de la zona, proliferación de serpientes cascabel y otros, por lo que en varias oportunidades el personal estuvo a punto de abandonar los trabajos, pero felizmente se pudo superar gracias a la fe y la esperanza puesta por todo el equipo de la brigada de exploración y que por otra parte era el único grupo integrado totalmente por cruceños y por lo tanto aptos para trabajos en ese terreno.

El 6 de mayo llegó a Mutún el Ing Miguel González y una comitiva, con la intención de supervisar los trabajos realizados y de cerrar anticipadamente la llamada «Operación San Pedrito». Esta comisión de alto nivel que permaneció en Mutún hasta el lunes 10 de mayo, visitó todo lo que se podía pero no estuvieron de acuerdo con la metodología empleada por lo que decidieron cerrar el proyecto de inmediato.

Le hice un apelo especial al Ing Gonzales pidiéndole que por favor nos permita seguir hasta el plazo final del 31 de mayo que se había establecido previamente y felizmente me lo concedió con el aditamento de haberme autorizado que contrate a D. Justo Bruto, un brasileño que había sido el capataz de los alemanes y a quien conocí en Corumbá el domingo 2 de mayo gracias a la mediación de Primo Suárez Argirakis.

De esa manera el sistema de trabajo cambió radicalmente y para lo cual abrimos una picada base con azimut 210 en la parte noreste del cerro, partiendo de la cota 125 hasta alcanzar la cota 610.

Pero fue en la cota 525 donde decidimos centrar nuestros trabajos basándonos en los pocos clastos coluviales de criptonelano encontrados. En ese nivel abrimos dos picadas que a modo de curvas de nivel salían hacia el norte y hacia el sur.

El 17 de mayo fue un día lluvioso y frío y desde muy temprano avanzamos hacia el norte siguiendo la cota 525, cuando a las 15:30 dimos de frente a un hermoso afloramiento de un manto de criptomelano cuyo negro color contrastaba nítidamente con el gris acerado de la hematita Fe2 O3 que lo recubría por encima y por debajo.

Por supuesto que todo el equipo, 11 hombres, estallamos en una alegría desbordante porque por fin se había puesto de manifiesto de que el manganeso en Mutún no era un mito.

Fue tanto el revuelo que a nivel de Comibol causó este hallazgo, que el 17 de junio y por primera vez en la historia de Comibol, toda la plana mayor de esta empresa se trasladó a Puerto Suárez en el avión aerocomander y luego a Mutún, encabezada por su presidente el Gral Carlos Hurtado Gomez, su vicepresidente Cnel Enrique Álvarez Moreira, los ingenieros de su staff Gustavo Alipaz Alcázar, Roberto Ballivián Prado, Guido Mendieta Montero, el piloto de la aeronave Gral Medardo Chávez y su copiloto, con el exclusivo propósito de conocer sobre el yacimiento de manganeso y los detalles del descubrimiento, habiendo recibido toda la información pertinente hasta el día siguiente 18 de junio en que al finalizar la tarde se trasladaron a Puerto Suárez para viajar a Santa Cruz de la Sierra, donde lamentablemente nunca llegaron porque no se supo nada del avión y de sus ilustres ocupantes.

Todo el personal de Mutún se movilizó durante los siguientes 30 días participando en misiones de rescate a lo largo de todo el probable recorrido con la eficaz colaboración de aviones y helicópteros brasileños y argentinos pero sin ningún resultado, hasta que finalmente y luego de 23 años fue encontrado al sur de Pailón.

Años después el manganeso sería explotado pero de manera muy rudimentaria hasta que sufrió un hundimiento que paralizó la operación.

A fines de 1980 el Ministerio de Mineria llamó a un concurso nacional para ocupar la gerencia del Distrito Mutún, habiendo sido elegido el Ing. German Carrasco Ardaya de la nómina de elegibles No 2 (según Notificación del 15 de octubre de 1980).

De esa manera llegado el 17 de mayo de 1981 tuve la oportunidad de conmemorar el décimo aniversario del descubrimiento del criptomelano en Mutún en el mismo lugar del descubrimiento, habiendo contado con la asistencia de unas mil personas entre civiles y militares provenientes de Corumbá, Quijarro, Puerto Suárez, El Carmen y Roboré, realzada con la presencia del Cnl. Carlos Macias Klargevic comandante del Regimiento Castrillo de Puerto Suárez, del Cap. de navío Miguel Azurduy comandante del Distrito naval, del Tcnl Erwin Greminger comandante del grupo aéreo de combate de Roboré y del Gral Olvis Arias comandante de la V División de ejército con asiento en Roboré, además de la presencia del My Balderrama presidente de Sidersa con sede en La Paz.

Pero lo más destacable fue la importante presencia del Almirante Ramiro Terrazas co presidente de la Junta Militar de Gobierno, que le dio un gran realce al acontecimiento.

Éste acto fue una verdadera fiesta popular con un excelente churrasco camba, realzado con la especial actuación de bandas civiles y militares y que fue muy bien comentado por todos los medios radiales fronterizos
Solamente hubieron tres discursos, el del gerente del Distrito Mutún, el del Gerente general y el del Almirante Terazas.

Desde aquel entonces ha transcurrido medio siglo y esa reserva potencial calculada en unas 20 millones de toneladas de mineral de manganeso de excelente calidad, todavía duerme en un sueño profundo cuyos ronquidos no llegan hasta La Paz, sin embargo existe la esperanza que más pronto que tarde se permita su explotación racional y técnica para beneficio de la región, de Santa Cruz y de Bolivia.

El Ing Milko Moreno, hasta hace muy poco presidente de la Empresa Siderúrgica de Mutún ESM, tenía muy avanzado un estudio de reactivación del yacimiento de criptomelano de Mutún que vale la pena no dejar que caiga en el baúl de los recuerdos.

La gobernación, el Comité Cívico y la sociedad cruceña en su conjunto ya no se pueden dar el lujo de dejar que el tiempo pase mirando los atardeceres desde nuestros balcones.

Ing. Germán Carrasco Ardaya.

Mostrar más

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba
Mostrar botones
Ocultar botones