Una hora antes de la posesión, diputada evista denunció el cambio del alto mando policial por “no haber detenido a Evo”
Cerca de las 16:12 de este lunes, la diputada evista Gladys Quispe afirmó que se iba a realizar el cambio del entonces comandante general de la Policía, Álvaro Álvarez, y del director nacional de la Inteligencia de la Policía Boliviana, Edwin Félix Pérez Mendieta, por presuntamente no haber aprehendido al expresidente Evo Morales.
“Extraoficialmente hemos tomado conocimiento de que el día de ayer en horas de la noche ha habido una reunión en la Casa Grande del Pueblo con altas autoridades, donde han convocado al general mayor, Álvaro Álvarez, actual comandante de la Policía Boliviana; al director nacional de la Inteligencia de la Policía Boliviana, general primer, general primero Félix Edwin Pérez Mendieta”, afirmó Quispe en una conferencia de prensa.
Según Quispe, quien no presentó pruebas, señaló que las dos autoridades policiales fueron cuestionadas por el Gobierno, en especial por el ministro Eduardo del Castillo.
“Ha habido una discusión fuerte en la Casa Grande del Pueblo, donde incluso han definido que hoy van a rodar cabezas”, aseveró.
“Se conoce quién va a sumir en vez del comandante Álvarez, el general Augusto Russo Sandoval, este es el candidato del ministro de Gobierno”, agregó la diputada evista, quien acusó a Russo de “persecución política cometiendo actos ilegales” contra Morales durante el gobierno de Jeanine Añez
“Van a ser destituidos y cambiados por no haber detenido a Evo Morales”, indicó Quispe.
Casi una hora después, a las 17:23, se realizó el acto de posesión de nuevas autoridades en todo el alto mando policial y los comandantes de cada departamento.
Russo fue posesionado como comandante general para reemplazar a Álvarez, quien hace solo dos semanas había sido ratificado en su cargo.
En tanto, Pérez Mendieta fue reemplazado por el general primero Ismael Tito Villca Vargas, en el cargo de Director Nacional interino de Inteligencia.
Por su parte, Russo afirmó que correspondía a las promociones 89, 90 y 91 asumir los cargos.
El sorpresivo cambio de jefes policiales se dio en medio del conflicto entre el Gobierno y el bloque evista por la denuncia contra Evo Morales por el caso de presunto trata y tráfico de personas.
