El exprocurador Wilfredo Chávez indicó que uno de los factores para su salida fue porque no había condiciones debido a la supuesta injerencia que el ministro de Justicia, Iván Lima, pretendía en las labores de la Procuraduría General del Estado; incluso, sugirió que se contrate a un bufete de abogados y se le diera 1.000 millones de dólares para que atienda todos los arbitrajes contra el Estado.
“(…) Me he ido porque no había condiciones. Les voy a dar dos datos para que se entienda de qué estoy hablando. Primero, se ha emitido hace unos meses un decreto supremo que, poco más, estableció el tutelaje del Ministerio de Justicia a la Procuraduría. Eso es inaceptable, porque la Procuraduría es una institución constitucional e independiente; se puede acordar algunos temas, pero no podemos entregar, como pedía el Ministerio de Justicia, los arbitrajes”, aseguró la exautoridad.
La semana pasada, el exprocurador fue sustituido por César Siles, exviceministro de Justicia y Derechos Fundamentales; el nombramiento fue aplaudido por el ministro de Justicia, quien dijo que conocía al nuevo procurador desde las aulas universitarias.
“Voy a dar un detalle que no lo quería decir, pero creo que es oportuno decirlo. En una reunión con el ministro de Economía, -estábamos, Lima, el ministro Montenegro y yo hablando de los arbitrajes-, y el ministro Lima ha dicho abiertamente que había que conseguir un bufete de abogados, darle 1.000 millones de dólares, para que se encargue de arreglar todos los arbitrajes; y si ganaba o perdía, era un problema del bufete de abogados. Yo de verdad he pensado que era una broma. El ministro Montenegro, aparte de ponerse rojo, se enojó y le dijo: ¿qué le pasa al ministro? Además, ¿quién tiene 1.000 millones, bajo qué responsabilidad, bajo qué parámetros? Ese es el grado de autoridad que teníamos bloqueando a la Procuraduría”, reveló Chávez la semana pasada en Abya Yala.
Chávez contó que también tuvo otro reciente episodio con Lima por referirse a la suspensión de las interpelaciones en la Asamblea Legislativa contra ocho ministros. Su posición sobre el tema provocó molestia en el ministro de Justicia.
“Lima me manda un mensaje cuestionando mi declaración, hemos quedado hablar en el gabinete jurídico que ya no hubo porque vino el cambio”, indicó el exprocurador.