Procuraduría investigará a Eaglecrest por la explotación de cerro San Simón
Luego que una comisión institucional concluyera su visita al cerro San Simón, el asambleísta departamental Paul Bruckner Barba anunció que junto a un equipo de abogados acudieron a la Procuraduría General del Estado, a objeto de investigar las operaciones de explotación de oro y manganeso a cargo de la empresa transnacional Eaglecrest Exploration Bolivia S.A. (Eebol).
Bruckner explicó que el objetivo es impulsar una auditoría no solo a los últimos cinco años de explotación minera sino mucho más allá, para conocer de manera exacta la cantidad de regalías que el Beni ha dejado de percibir por la extracción de sus recursos naturales no renovables.
Para ese efecto ha tomado contacto con un bufete de abogados de Santa Cruz, que estaría encargado de gestionar ante la Procuraduría, la necesidad que el Estado recupere el control sobre las reservas de oro, manganeso y otros minerales que tiene el cerro San Simón y que actualmente estaría en manos de empresas ilegales.
Considera necesaria que esta acción esté acompañada por otro bufete de abogados de Nueva York, porque se conoce que la Eaglecrest Exploration Bolivia S.A. cotiza sus acciones en la Bolsa de Valores de Nueva York y Canadá en base a las reservas bolivianas que son ofrecidas en propiedad en un cien por ciento.
Durante una conferencia de prensa efectuada la semana anterior, Bruckner estuvo acompañado del presidente del comité cívico Geiser Chávez, diputados del departamento y valoró la actitud de las instituciones locales por haber tomado consciencia sobre la importancia de las reservas de minerales que tienen.
En ese marco destacó la decisión del Gobernador saliente de poner en vigencia la Secretaría de Minería y aplaudió la voluntad del gobernador electo Alejandro Unzueta, para dar continuidad al trabajo de fiscalización y control de las empresas que operan en San Simón.
Recientemente la Secretaría de Minería ha enviado a una comisión para fiscalizar “in situ” y ha traído valiosa información proporcionada por los lugareños, en sentido que Eebol, en concomitancia con algunas cooperativas asentadas, no solo explota ilegalmente, sino que incluso evade responsabilidades ambientales por la explotación a cielo abierto.
La comisión ha elevado un informe donde se destaca que por versión de los mismos ejecutivos de Eebol, tanto los concentrados de manganeso y como de oro salen de manera directa vía Santa Cruz a mercados de Bélgica y China, lo cual se hace imposible cuantificar la cantidad de minerales que comercializan.
Esa comisión ha dado fe que la Eaglecrest Exploration Bolivia S.A tienen grandes plantas procesadoras de concentrados de oro y manganeso, que son operadas por sus técnicos y por personal de apoyo que sale de las mismas comunidades. Lo que no pudo confirmar es la legalidad del asentamiento de esa empresa porque los ejecutivos no quisieron entregar dicha información.
En Beni se conoce que, durante el gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, la Eaglecrest ingresó a la serranía de San Simón para realizar trabajos de exploración, pero en el gobierno de Evo Morales habría migrado hacia un contrato de explotación del cual ni el Ministerio de Minería, la AJAM ni el Senarecom logran abrir la información.
Bruckner planteó fortalecer la Secretaría de Minería y convocó a mantener la unidad de las instituciones benianas, “como la única manera de recuperar San Simón” para el Beni.
El asambleísta que representa a la provincia Iténez – donde están ubicadas las reservas minerales – dijo que la región fronteriza es tan rica en minerales que recientemente en la región de Piso Firme se habría decomisado 200 kilos de oro sin que ninguna autoridad habría informado nada al respecto.
Lamentó que otras instancias del Estado no hayan respondido a varias peticiones de informe escrito para conocer la situación de las empresas que operan en una de las mayores reservas de oro que tiene Bolivia y que, pese a ello, las autoridades de gobierno mantienen un silencio absoluto.
