Petróleo&Minería

El 2021 es un buen año para los países productores de petróleo

El petróleo sigue siendo, pese a las críticas por la contaminación, el principal combustible que mueve el mundo y durante el pasado fin de semana el precio del WTI (West Texas Intermediate) cerró con un alza del 1 % hasta los $us 72,94, impulsado por un nuevo descenso semanal en las reservas de Estados Unidos. Este es el petróleo de referencia estadounidense y también para otros países como Ecuador.

Inicialmente, el desacuerdo en la OPEP+ (Organización de Países Exportadores de Petróleo y 10 países aliados) la semana pasada hizo pensar en una oferta reducida y disparó los precios, pero ahora se teme que pueda desembocar en incrementos unilaterales del suministro por parte de sus miembros.

“Tras el colapso de las conversaciones de la OPEP+ , el miedo está atenazando los mercados de petróleo y haciendo caer los precios más del 6 % en solo tres días”, señaló esta mañana la analista Sophie Griffiths, de la firma Oanda.

“La rencilla actual en la OPEP+ subraya no solo la fragilidad del mercado en un contexto específico del COVID-19, sino la animosidad amplia entre el grupo de 23 naciones que están forzadas a unirse para gestionar el mercado y, por supuesto, tienen intereses competitivos directos en la venta de su petróleo al precio más alto durante el mayor tiempo sostenible”, explicó a Efe Louise Dickson, de Rystad Energy.

Sin embargo, el 2021 marca un buen año para estos países porque el nivel del precio del barril WTI y Brent (de referencia para Europa) sobrepasa actualmente los $us 74.

En enero de este año el crudo WTI recién sobrepasaba los $us 50 gracias a un control de la producción de la OPEP+, se consolidaba una línea que venía subiendo desde noviembre.

Mientras que en febrero alcanzó su máximo luego de 13 meses (desde el 7 de enero de 2020) y subió a $us 61,49. En mayo superó los $us 65.

Para el experto ecuatoriano en petróleo Galo Salcedo, Ph. D. en geología, el factor principal de ese incremento paulatino y sostenido es la creciente demanda, ya que países que ya han avanzado con la vacunación han comenzado a abrir fábricas, ir a las oficinas, consumir más energía, en general una mayor necesidad de crudo.

A su vez menciona que la oferta no ha aumentado por las decisiones de la OPEP y sus aliados en junio de no aumentar la producción porque probablemente Irán vuelva a producir, pero se tendrá que ver qué pasa con este porque mantiene sanciones de EEUU.

“Probablemente va a seguir subiendo un poco más, las proyecciones dicen que podría llegar hasta 80 dólares a fin de año. Lo que pasa es que los mercados internacionales parece que no le han dado aún importancia al incremento de la demanda. No se esperaba este incremento de la demanda tan pronto”, dice Salcedo, quien añade que podría bajar un poco si Irán, que tiene grandes reservas, comienza a producir más, pero tampoco piensa que sería mucho.

El explica que los precios que se tiene ahora son para compras del mes siguiente y usualmente el crudo ecuatoriano -Oriente y Napo- son castigados por tener menos grados API en referencia al WTI, pero cuando no hay mucha oferta, como en estos momentos, son beneficiosos para el país. También indica que en precio final de venta también incide el transporte y la cantidad de azufre que tenga el petróleo.

Carlos Uribe, profesor de economía de la USFQ, comenta que lo del año pasado fue un tema totalmente atípico atado al inicio de la pandemia y las restricciones de movilidad en todo el mundo.

Uribe recuerda que los precios del año anterior, que llegaron incluso a ser negativos, se debieron a la repentina paralización de la demanda en medio de una sobreoferta, ya que incluso se tenían llenos los sitios de almacenamiento.

Añade que todos los gráficos de consumo mundial hace ver que la recuperación fue en forme de v, y en el rato que los Gobiernos y personas entendieron cómo funcionar en medio de la pandemia la demanda por petróleo y sus derivados volvió, incluso en algunos casos, a niveles prepandemia.

“Estamos viendo un regreso al equilibrio que vivimos antes de la paralización económica por las cuarentenas del año pasado”, dice Uribe, quien comenta que la utilización del petróleo está en muchas cosas de nuestra vida diaria, incluyendo el plástico y hasta cosméticos, y su importancia para un país dependerá de la estructura que este tenga.

También vale recordar que el otro tema que mueve los precios del petróleo, la política, no ha tenido grandes cambios de intereses en los últimos meses./El Universo

Mostrar más

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba
Mostrar botones
Ocultar botones